Elegir el tejido con el que tapizar tú sofá, no es una decisión tan sencilla como pudiera parecer. Sobre todo, si no cuentas con toda la información, o no conoces bien las telas y sus diferentes composiciones o características.
En este artículo vamos a explicarte algunos aspectos básicos en los que deberías fijarte para valorar el tejido y sus componentes.
Es importante pensar en el uso que se le va a dar al sofá o sillón, es decir, quien lo va a utilizar y el uso que le va a dar, por ejemplo: si hay niños en casa, si hay mascotas, si alguno de los usuarios tiene algún tipo de alergia, si vives en una zona fría o más cálida.
Estas preguntas determinan si necesitas un tejido más fuerte, con una limpieza fácil y rápida, Un tejido con fibras más naturales, etc Lo iremos analizando a lo largo del artículo.
La mayoría de clientes suelen buscar un tejido que sea duradero y resistente para no tener que retapizar después de unos años de uso.
Los tejidos resistentes son aquellos que están entre 15000 y 20000 ciclos Martindale o superiores. También conocido como test de resistencia a la abrasión.
Este es un test o prueba que se realiza al tejido y marca la resistencia al roce que presenta ese tejido en cuestión.
Consiste en frotar con lija o lana el tejido, a una considerable presión y así se puede saber, la cantidad de roces o sentadas que dicho tejido aguantará.
A más ciclos, más roce aguanta ese tejido, o lo que es lo mismo, más fuerte y resistente será.
Ahora ya sabes un de los aspectos más importantes a la hora de elegir el tejido para tapiar tu sofá.